...La luz del sol entraba por la ventana, acariciándote con un calor impropio de febrero. Abriste lo ojos, comenzaste a estirar todo tu cuerpo, pero te quedaste inmóvil, paralizada, al recordar que tenía sus ojos clavados en ti.
Tu: ¿Cuanto tiempo llevas despierto?
Bill: El suficiente.
Tu: ¿El suficiente para qué?
Bill: para sabes que se te mueve la nariz cuando respiras añ dormir.
Abriste los ojos como si hubieses visto un fantasma.
Tu:¿¿Qué??
Bill:Eso
Tu:Eres increíble, te das cuentas de cientos de cosas que yo habría pensado que eran tonterias hasta..
Bill: ¿Hasta que?
Tu: Hasta que lo has dicho tu.
Empezasteis a reiros como dos niños pequeños.
Entonces te fijaste en su costado, tenía un enorme tatuaje con su inicial y unas frases en alemán que no entendías.
Tu: ¿Qué dice aquí?
Bill: Algún día te lo traduciré.
Tu: No, ahora.
Bill: Pues ahora no, señorita caprichosa.
Dijo esa última frase con tono burlón.
Bill: ¿Que hora... ¡¡DIOS MÍO!¡son las once!¡Y a las diez tengo una entrevista!
Tu: ¿Te vas?
Te miró con una sonrisa a la vez que se abrochaba los pantalones.
Bill: Si, pero sabes que esto no será solo una noche más. Sabes que volveremos a vernos, sea como sea.
Cogió una de las tarjetas del hotel y escribió su número de teléfono personal.
Bill:¿Me prometes que llamarás?
Tu:¿Y tu?
Bill: No lo prometo, lo juro.
Se puso la chaqueta y se fué a paso ligero de la habitación. No podías creer nada de esto, era la primera vez que te pasaba esto. Nunca habías sentido algo así. Nunca habías dicho adiós a una persona que conocías desde hace 12 horas y la habías necesitado desde le minuto 0. Querías confiar y dejarte llevar, pero al mismo tiempo tenías miedo, no querías hacerte ilusiones para nada... Pero ya era oficial, lo necesitabas.
Siento estar tanto tiempo sin actualizar, espero hacerlo más frecuente a partir de ahora, gracias por su apoyo :)
viernes, 11 de febrero de 2011
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